Por Ricardo Bustos
Desde un sector ideológico, nos dicen que este es el resultado de épocas “neoliberales” que dejaron al país en la miseria, con drogas, corrupción, robos , asesinatos, violaciones, jubilados al borde de la desnutrición y ni hablar de los niños o jóvenes madres que recurren a un embarazo para recibir algún subsidio, chicas y chicos que, como no estudian ni trabajan, les regalan unos pesos para hacer mas placenteros sus días de ocio y así no molestan al gobierno de turno, funcionarios y empresarios en el banquillo de los acusados todos los días desfilando por los Tribunales, subsidios multimillonarios a los amigos del poder que fueron a parar a sus bolsillos y no para los que fueron destinados, rutas destruidas , falta de luz, gas, aumentos desmedidos en los medicamentos, aumentos en los combustibles cada 15 días, la canasta familiar por las nubes cuando nos dicen que está al alcance de todos y la realidad ya la conocemos.
Orlando, que es un hombre de “pocas pulgas”, me dijo que está “repodrido” de tanta mentira. Es imposible creer que la culpa es de los otros. Al final de cuentas, los dos coincidimos en que la culpa es de nosotros por no saber elegir a la gente que nos va a administrar los bienes y capitales del Estado y le firmamos un contrato con los ojos cerrados a dirigentes que en algunos casos después nos enteramos que no tienen los estudios primarios finalizados para ocupar cargos de responsabilidad.
Le digo a mi amigo Orlando, que los Caudillos nunca se fueron de la escena nacional, pues si bien es cierto no hay rostros visibles en la Televisión o los Diarios, cada pueblo por más pequeño que sea tiene el suyo y es el que decide quién será candidato a Concejal, Diputado o Senador y aún están frescas en mis oídos las palabras de quien en vida fuera una de las damas más poderosas de la industria argentina como fue Amalita Fortabat cuando dijo … ”A Palito Ortega, lo hice Gobernador y si quiero lo hago Presidente”… y la verdad es que mucho no faltó para cumplir sus intenciones.
Hay intendentes de pueblos pequeños con la población en los límites de la pobreza y desnutrición a quienes la Justicia les ha encontrado millones de pesos escondidos junto con varios autos de alta gama, haciendo una vida que no se condice con los salarios que perciben en sus cargos.
En ese momento de nuestra charla llega Pedro, nuestro diariero y nos comenta que la expresidente Cristina, está al borde de la prisión, algo que, como incrédulos natos por los antecedentes que tenemos en el país, resultaría imposible de creer porque tiene todo el entramado político armado para que la protejan en la Legislatura Nacional, porque en su gran mayoría, los Senadores y Diputados fueron socios en sus negocios corruptos que dejaron al país sumidos en la desesperanza y miseria.
Por temor a un estallido social, el gobierno actual sigue exprimiendo a la ANSES pagando cada día mas planes sociales sin contraprestación, motivo por el cual las generaciones de jóvenes y sus padres o abuelos que perciben la «ayuda social», seguirán sin conocer el significado que tiene la cultura del trabajo.
Así las cosas seguiremos gastando los dineros de la Anses que supimos conseguir con nuestros años de trabajo para que las nuevas generaciones tengan una vida digna… la misma que hoy los que peinamos canas, lamentablemente no tenemos.
«Sería una necedad pretender que el pueblo no puede cometer errores políticos. Puede cometerlos, y graves. El pueblo lo sabe y paga las consecuencias; pero comparados con los errores que han sido cometidos por cualquier género de autocracia, estos otros carecen de importancia». John Calvin Coolidge (1872-1933), Presidente de Estados Unidos (1923-1929).
El autor es: Locutor Nacional-Comunicador.
Capiovi Misiones, Argentina
DNI 7788556